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Un profundo estudio de cómo la
iglesia del Señor Jesucristo
puede llegar a caer en una
rebelión contra Dios y su santa
palabra.

Trabajo realizado por el pastor
evangelista Marcos Morales Chávez.

Ministerio evangelístico Pentecostal
“El Fin Se Acerca” Santiago Chile. –

febrero 2014.

Contenido

1- Introducción.
2- Advertencia de Pablo a los
gálatas.
3- ¿Qué significa y como se
manifiesta la apostasía?
4- Existen dos clases de apostasía.
5- Síntomas evidentes de una
desviación.
6- Grandes síntomas de la
apostasía.
7- Culminación

“¡Oh gálatas insensatos! ¿Quién os fascinó para no obedecer a
la verdad, a vosotros ante cuyos ojos Jesucristo fue ya

presentado claramente entre vosotros como crucificado? Esto
solo quiero saber de vosotros: ¿Recibisteis el Espíritu por las
obras de la ley, o por el oír con fe? ¿Tan necios sois?
¿Habiendo comenzado por el Espíritu, ahora vais a acabar por
la carne?” Gálatas 3:1-3.
Pablo escribió esta carta aproximadamente entre los años 48 al 55 d. C. esta
era una iglesia que se encontraba ubicada en la ciudad de Galacia (distrito
central del Asia menor, era una gran ciudad que pertenecía una provincia
romana) y estaba compuesta en su mayoría por judíos cristianos y otros
gentiles que se habían convertido a la fe cristiana, se le conoce como “la
carta magna de la libertad cristiana”. Esta carta fue escrita como una
protesta contra la corrupción del evangelio y los versos claves de esta carta
los escribió Pablo en Gálatas 1:6-8.
Satanás el diablo pretendió entrar a esta joven y emergente iglesia, por
medio de los falsos maestros judaizantes que les enseñaban que debían
circuncidarse y guardar la ley para ser salvos (típico de los sectarios; “no
basta la fe en Cristo para ser salvo siempre hay que hacer algo”). Pablo
afirma su carácter apostólico y las doctrinas que él enseña, para confirmar a
las iglesias de Galacia en la fe de Cristo, especialmente en relación al
importante punto de la justificación solo por fe y nada más. Aunque el tema
es esencialmente el mismo que el discutido en la carta a los Romanos – esto
es, la justificación por fe únicamente – en esta epístola, sin embargo, la
atención está particularmente dirigida al punto de que el hombre es
justificado por la fe.
La verdad esencial de la justificación por fe en vez de por las obras de la
ley, había sido oscurecida por la insistencia de los judaizantes de que los
creyentes en Cristo debían guardar la ley si esperaban ser perfectos delante
de Dios. Cuando el insigne apóstol Pablo supo que esta enseñanza había
comenzado a penetrar con gran fuerza en las iglesias de los hermanos
gálatas, y que los había alejado de su herencia de libertad, escribió la
apasionada protesta contenida en esta epístola.

Pablo les advierte a los Gálatas que pueden terminar muy mal
El apóstol aquí les reprocha una actitud que es muy común hoy en día en
las congregaciones de este tiempo, comienzan bien (en el espíritu) y luego
terminan mal (en la carne), la apostasía, una de las más grandes señales del
retorno de Cristo por su iglesia, es una realidad latente, lamentable y
catastrófica en la mayoría de las actuales denominaciones cristianas (1ª.
Timoteo 4:1-3, 2ª. Tesalonicenses 2:3).

Existe una notoria tendencia en los creyentes y concilios en la actualidad;
la de desviarse lenta y paulatinamente del evangelio bíblico, sencillo y
poderoso para transitar por un camino distinto y un evangelio secularizado
y adaptado a los moldes mundanos y paganos. Los frutos de este neo
evangelio son los de una iglesia numéricamente grande, influyente en la
sociedad y popular, no obstante, carente de poder espiritual, santidad
bíblica y autoridad moral.

¿Qué significa apostasía y como se manifiesta?

El Espíritu Santo ha revelado, que en los últimos tiempos se apartarán
muchísimos creyentes de la fe en Jesucristo. La Apostasía es una de las
grandes señales del retorno del Señor y sin embargo casi nadie habla de
ella, y los pocos predicadores que la mencionan lo hacen muy vagamente.
Todos estamos de acuerdo en que el aumento de la maldad, lo sucesivo de
los terremotos, las guerras, hambres, pestilencias, el reverdecimiento de la
higuera (Israel), el aumento de la ciencia, son claras y evidentes señales del
retorno inminente de nuestro Señor y Salvador Jesucristo a buscar a su
Iglesia, sin embargo, si en verdad estamos predicando la venida del Señor
(aunque muchos simplemente ya no creen ni enseñan que Jesús viene), y
decimos que todas las señales se han cumplido, ¿Por qué no hablamos de la
Apostasía?.
La palabra Apostasía aparece como tal, dos veces en el Nuevo Testamento
(2ª. Tesalonicenses 2:3, 1ª. Timoteo 4:1-3). Según el Diccionario “Vila-
Escuain”, lee AFISTEMI que significa: “Volverse atrás, recaer, desertar,
retirarse, apartarse de la fe”, y según el Diccionario Hispano Océano, es:
“Negar la fe Cristiana, cambiar de opinión o de Doctrina”. Es claro
entonces afirmar que según el significado de la palabra, los apostatas no
son los movimientos sectarios, las religiones archi conocidas y las
filosofías del oriente que enseñan sus doctrinas anticristianas (Testigos de
Jehová, Católicos Romanos, Mormones, Adventistas, budistas, Solo Jesús,
Rosacruces, etc.), sino, indudablemente, lo que está dentro de la iglesia del
Señor, del cuerpo, de la Verdad, de la Luz, los que recayeron, volvieron
atrás, desertaron, cambiaron de opinión y de Doctrina; “Salieron de
nosotros, pero no eran de nosotros; porque si hubiesen sido de nosotros
habrían permanecido con nosotros; pero salieron para que se manifestase
que no todos son de nosotros” 1ª. Juan 2:19, “Cuando llegó la noche, se
sentó a la mesa con los doce. Y mientras comían, dijo: De cierto os digo,
que uno de vosotros me ha de entregar” Mateo 26:20-21.
Muchos predicadores y denominaciones tienen como teología “la verdadera
iglesia no apostata”, pero eso no es cierto, la palabra apostasía significa
justamente “desviarse de la fe, negar la fe”, es decir, solo puede apostatar
un cristiano, un hijo de Dios, una persona que estuvo en la verdad y se

desvió, la apostasía es un fenómeno que solo se evidencia dentro del
cristianismo.
Existen dos clases de apostasía según las escrituras
A- Apostasía Moral.
Es aquella que está relacionada directamente con el individuo en particular,
se refiere a un creyente, un hijo de Dios, un cristiano especifico que poco a
poco, lentamente deja a Cristo y vuelve a transformarse en un esclavo del
pecado (ejemplo; “Demas” 2ª. Timoteo 4:10), estos son los desertores, los
que abandonan la fe, dejando a Cristo, se apartan de la Iglesia y vuelven al
pecado; “Mirad hermanos, que no haya en ninguno de vosotros corazón
malo de incredulidad para apartarse del Dios vivo” Hebreos 3:12,
“Ciertamente, si habiéndose ellos escapado de las contaminaciones del
mundo, por el conocimiento del Señor y Salvador Jesucristo, enredándose
otra vez en ellos son vencidos, su postrer estado viene a ser peor que el
primero” 2ª. Pedro 2:20. Ellos son “los que un día fueron y hoy no son, los
que un día estuvieron y hoy no están”. Nosotros los llamamos “los
descarriados” en nuestra jerga pentecostal.
B- Apostasía Teológica.
Es el rechazo o la negación de todas o bien, de algunas de las enseñanzas o
doctrinas de Cristo. Es la falsa enseñanza que nace, origina y crece dentro
de la misma iglesia o aquellos que la introducen encubiertamente: “Pero
hubo falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros falsos
maestros, que introducirán ENCUBIERTAMENTE herejías destructoras, y
aun negarán al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismo
destrucción repentina” 2ª. Pedro 2:1, “Y su palabra carcomerá como
gangrena; de los cuales son Himeneo y Fileto, que se desviaron la verdad
(Apostataron), diciendo que la resurrección ya se efectúo, y trastornan la
fe de algunos” 2ª. Timoteo 2:17.
Vemos el desfile de millones de hermanos nuestros en la fe, cristianos,
creyentes que se han “descarriado”, se volvieron atrás, dejaron la Iglesia,
desertaron, abandonaron la causa, se volvieron al mundo, en una triste
realidad, Hebreos 5:4-6. Se cree que en Chile más de 1.800.000 de
personas, las cuales fueron, un día, cristianos-evangélicos y que hoy no lo
son. Es decir, en términos teológicos, diríamos que son 1.800.000 “hijos
pródigos” que han cometido Apostasía personal y que esperamos que algún
día vuelvan a casa y se reconcilien con Dios (Lucas 15:17-20).

Si este tipo de Apostasía es triste y lamentable, es sin lugar a dudas mucho
más terrible y funesta la llamada “Apostasía Teológica”, puesto que ella
daña a toda la Iglesia en forma global y no a un creyente específico o una
Iglesia local determinada.
Hoy más que nunca debemos preocuparnos de la enseñanza; “Entre tanto
que voy, ocúpate en la lectura, la exhortación y la enseñanza” 1ª. Timoteo
4:13. Debemos tener sumo cuidado de la Doctrina; “Pero tú, habla lo que
está de acuerdo con la Sana Doctrina” Tito 2:1, debemos ser ortodoxos,
inflexibles, radicales y fundamentalista en nuestros principios y
enseñanzas. Pero tristemente es todo al revés, hoy es cuando más
fácilmente el pueblo de Dios escucha a “espíritus engañadores”, la Iglesia
de este tiempo está más preocupada en lo que “siente” que en lo que
realmente “cree”.

Síntomas evidentes de una desviación

El deber de cada predicador fiel del evangelio y cada ministro auténtico del
Señor es advertir al pueblo de Dios del peligro de la apostasía (Ezequiel
33:1-5, Hechos 20:26-27) y saber identificar cuáles son los síntomas de
una apostasía en cualquier congregación evangélica (Levítico 10:10,
Jeremías 15:19).
Síntomas= “El término síntoma no se debe confundir con el término  signo ,
ya que este último es un dato objetivo y objetivable. El síntoma es un aviso
útil de que la salud puede estar amenazada sea por algo psíquico, físico,
social o combinación de estas. En  medicina , la referencia subjetiva que da
un enfermo por la percepción o cambio que reconoce como anómalo, o
causado por un estado patológico  o  enfermedad ”.
Podríamos decir que los síntomas de la apostasía son los avisos, evidencias,
amenazas, referencias o muestras de desviación de la verdad de parte de
una iglesia o un ministro. Los síntomas no son los frutos o hechos ya
consumados de la apostasía, sino lo hechos o actos previos, es decir
anteriores a la apostasía. Son los síntomas de una gran degradación
espiritual que terminan en una rebelión contra Dios y su santa palabra.
Existen muchas preguntas que uno se hace en lo que al tema de la apostasía
se refiere; ¿Cómo una iglesia sana en la fe se puede comenzar a desviar de
la verdad? ¿Cómo se manifiestas la apostasía? ¿Cuáles son los síntomas
más notorios de la desviación de la verdad en una congregación? ¿Por qué
razón miles de pastores se desvían de la verdad? ¿Cuál es la fuerza tan
potente que está arrastrando a tantos cristianos a divorciarse de la palabra
de Dios? ¿Cómo puede una iglesia que se desvió de la verdad volver al
camino correcto?

Grandes síntomas de la apostasía

1- Negación u omisión de una o más doctrinas básicas de la fe
cristiana; las grandes e históricas congregaciones, cristianos como
los modernos y prósperos ministerios neo pentecostales, han dejado
de lado la importancia de las grandes doctrinas de la fe evangélica,
los pilares de nuestra fe y han permitido que entren otras doctrinas
que niegan directa o indirectamente a estas (2ª. Pedro 2:3, Tito 2:1,
Hebreos 13:9, Gálatas 1:6-8).
2- Pérdida de convicciones y principios especialmente en los
líderes cristianos; el celo doctrinal, la pasión por Dios y su fervor
por la palabra santa de Dios está siendo dejada de lado y los líderes
de hoy tranzan con demasiada facilidad (Santiago 1:8, 1ª. Timoteo
3-4, Apocalipsis 3:15).
3- El mensaje genuino comienza a diluirse, se omiten temas vitales
en relación a la salvación; para los modernos predicadores de
plásticos de este tiempo es más importante la bendición material, los
logros, el éxito, el placer y la felicidad humana que la salvación de
los pecadores y la santidad de los creyentes (Lucas 19:10, 1ª.
Corintios 15:1-3, 1ª. Timoteo 1:15).
4- Pérdida del sentido auténtico y el valor de la música sacra, el
diablo nuevo “jefe de coro”; es francamente espantoso y patético
el estilo de música y adoración en las congregaciones actuales, los
shows y la música mundana y sensual han reemplazado a la
verdadera música de Dios (Salmo 92:3, Juan 4:24, Hechos 16:25,
Colosenses 3:16).
5- Pecados groseros son justificados y pasados por alto, la
disciplina cristiana se deja de lado; todo tipo de pecados y malas
prácticas se justifican, no se corrigen ni disciplina argumentado que
Dios es amor y que “él no nos llamó a juzgar” (1ª. Corintios 5:11,
6:9-11, Romanos 6:1, Tito 3:10-11, Hebreos 12:5-8).
6- Modas mundanas comienzan a entrar y a tolerarse sin
justificación bíblica; la santidad externa sencillamente ya no se
predica y lo que es más; se ridiculiza y ataca a quienes la creen y la
practican (1ª. Tesalonicenses 5:23, 1ª. Corintios 11:14-15, 1º.
Timoteo 2:9, 1ª. Pedro 3:3).
7- Conceptos seculares y “nueva erianos” comienzan a penetrar y
son parte del vocabulario en los pulpitos; todo es permitido en la
enseñanza argumentado que Dios hace como él quiere y el Espíritu
Santo es quien hace a su “antojo” (Mateo 7:15, 1º. Pedro 4:11, 2ª.
Timoteo 3:16-17, Judas 14).
8- Falso espíritu de unidad y fuerte auge del llamado sincretismo
religioso; el ecumenismo es un estilo de vida y una meta de los

famosos líderes que quieren unir a todos los credos, la iglesia
verdadera no debe unirse a ningún falso movimiento religioso
(Amós 3:3, 2ª. Corintios 6:14-16, 1ª. Juan 2:15-17).
9- Apartamiento de la vida profunda en el Espíritu, se deja la
oración, el ayuno y la lectura bíblica de lado; una iglesia y un
creyente que deja de lado su vida de oración y ayuno sencillamente
están en grave peligro y en un punto de retroceso que puede ser fatal
(Mateo 7:7, Lucas 5:35, 1ª. Tesalonicenses 5:17, Hechos 13:2).
10- Practica del nepotismo en el liderazgo, pastores entregan la
iglesia a sus hijos como herencia y estos no tienen un llamado
divino y la corrompen; esta práctica es común en los liderazgos,
muere el viejo pastor sano en la fe, y su hijo y familiares, se
adueñan de la iglesia para corromperla y desviarla de la senda
antigua (Marcos 3:13, Efesios 4:12, Hebreos 5:4).
11- Compromisos indebidos con líderes políticos, amistad
“excesiva” con dirigentes del mundo político; la iglesia del Señor
Jesucristo tiene un rol en la tierra y no debe “hacerse amigos de los
césares” pues esto la debilita, la mancha y compromete su mensaje,
la iglesia está para respetar, orar y dar una palabra profética a los
gobernadores del mundo (Mateo 22:16-17, Juan 18:36, Romanos
13:2, 1ª. Timoteo 2:1-2, 2ª. Timoteo 2:4).
12- Falsa seguridad de salvación, el calvinismo radical entrando en
la iglesia; diabólica doctrina calvinista que asegura que un creyente
verdadero, haga lo que haga y pase lo que pase, no puede perder su
salvación, era una enseñanza arraigada en las iglesias
fundamentalistas (bautistas, episcopales, presbiterianas etc.) pero
ahora está entrando con fuerza inusitada en círculos pentecostales
para justificar una vida mundana y pecaminosa (1ª. Corintios 15:1-
2, Hebreos 10:25, 2ª. Pedro 2:20-22).
Debemos frenar a tiempo la apostasía; cuando comencemos a ver
manifestados abierta o encubiertamente, todos estos síntomas que hemos
analizado en este sencillo folleto, pongamos freno, estemos alerta y
vigilemos. Tenemos una gran responsabilidad ante los ojos de Dios,
debemos mantenernos firmes en la nuestra fe y en la sana doctrina; “Te
encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará a los vivos y
a los muertos en su manifestación y en su reino, que prediques la palabra;
que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con
toda paciencia y doctrina. Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la
sana doctrina, sino que, teniendo comezón de oír, se amontonarán
maestros conforme a sus propias concupiscencias, y apartarán de la
verdad el oído y se volverán a las fábulas. Pero tú sé sobrio en todo,
soporta las aflicciones, haz obra de evangelista, cumple tu ministerio” 2ª.
Timoteo 4:1-5.

Culminación

Estamos en el peor tiempo de toda la historia de la iglesia, ¡mucho cuidado
amados hermanos y amados pastores! si nos descuidamos y dejamos la
santidad, el amor a la palabra y el celo por las cosas de Dios fácilmente se
comenzarán a manifestar estos síntomas que nos pueden llevar a una
flagrante apostasía. Todos los creyentes, los ministros y las
denominaciones apostatas son candidatos a la gran tribulación; “Ten
cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello, pues haciendo esto,
te salvarás a ti mismo y a los que te oyeren” 1ª. Timoteo 4:16.

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