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“Aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de

nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo” Tito 2:13.

“Y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado
en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado”
Romanos 5:5.
“Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es
esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo? Pero si esperamos lo
que no vemos, con paciencia lo aguardamos” Romanos 8:24-25.

Introducción al libro

La extraordinaria carta del insigne apóstol Pablo escrita cerca del 57 a.C. es
una joya literia y uno de los libros mas importantes de la teología de todo el
nuevo testamento, al abordar las mas grandes doctrinas de la fe cristiana
como; la universalidad del pecado, la justificación por la fe en Jesús, el perdón
de los pecados, la vida eterna, la muerte en condenación, la gracia divina, la
santidad, la regeneración, la redención, el rol de Israel en la profecía bíblica
etc.

El valor de la Profecía biblica

El Espíritu Santo debe conducirnos a un estudio profundo de la profecía
bíblica. Los Redimidos vamos a vivir eternamente en un mundo llamado
Cielo. Nuestra morada eterna va a ser en una tierra nueva y cielo nuevo. Él
entonces, al final de los tiempos hará descender a la Nueva Jerusalén, con los
redimidos dentro de ella (Apocalipsis 21:1-2) como dice la escritura; “He
aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará con ellos; y ellos
serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios” (Apocalipsis
21:3).
No podemos siquiera empezar a imaginar las bendiciones maravillosas que
Dios tiene reservadas para los redimidos. Pero lo mismo, cientos de versículos
dicen que el Espíritu Santo nos ha revelado estas maravillosas bendiciones en
la poderosa Palabra de Dios (1°. Corintios 2:10). Lo triste es que la mayoría
de los cristianos, al parecer son ignorantes de esas promesas y, por lo tanto, no
tienen idea ni dimensionan, lo que en verdad Pablo quiso decir cuando
escribió: “Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son
comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse”
(Romanos 8:18).

El Rapto la gran esperanza para el cristiano

Estamos en tiempos finales y la gran promesa del retorno del Señor por su
iglesia es la viva esperanza de todo cristiano. En romanos 15:13, Pablo
escribió: “Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para
que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo”. Nuestro Dios es
un Dios de Esperanza que desea llenarnos de esperanza. Si conoce a Jesús
como su Salvador, usted es un heredero de algunas promesas increíbles, y si
conoce esas promesas y cree en ellas, usted puede vivir en este mundo
maligno con esperanza, gozo y grandes expectativas.
Algunas de las recompensas estarán relacionadas con el grado de autoridad
gubernativa que nos será otorgada durante el reinado milenial del Señor
(Lucas 19:11-27). Otras consistirán de coronas y vestiduras especiales.
Quizás habrá una “corona de justicia” para aquéllos que han vivido añorando
el regreso de Jesús (2°. Timoteo 4:7-8). Una “corona de vida” será dada a
aquéllos que perseveren en las pruebas (Apocalipsis 2:10 y Santiago 1:12).
Ancianos y pastores fieles recibirán una “corona de gloria”. Al final de este
tiempo de juicio, nosotros, la Novia de Cristo, nos sentaremos en una mesa de
banquete en el Cielo para celebrar nuestra unión con nuestro Novio, Jesús. La
Biblia la llama la “cena de las bodas del Cordero” (Apocalipsis 19:9). Será un
tiempo de celebración sin precedentes. ¡Los cielos resonarán con “Aleluyas”!
(Apocalipsis 19:1-6).
Cuando se termine la comida, regresaremos a la tierra con Jesús (Apocalipsis
19:11-14). Estaremos ahí en nuestros cuerpos glorificados cuando Sus pies
pisen el Monte de los Olivos y ese monte se parta a la mitad (Zacarías 14:1-
9). Estaremos ahí para gritar “¡Hosanna al Hijo de David! ¡Hosanna al Rey de
reyes!”, mientras cabalgue hacia el Valle del Cedrón en su caballo blanco y se
aproxime a la Puerta Este. En romanos 15:13, Pablo escribió: “Y el Dios de
esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que abundéis en
esperanza por el poder del Espíritu Santo”. Nuestro Dios es un Dios de
Esperanza que desea llenarnos de esperanza. Si conoce a Jesús como su
Salvador, usted es un heredero de algunas promesas increíbles, y si conoce
esas promesas y cree en ellas, usted puede vivir en este mundo maligno con
esperanza, gozo y grandes expectativas ¡Maranatha!
Ver la cara de Dios es una perspectiva emocionante, ya que la Biblia dice que
nadie ha visto nunca su rostro (Éxodo 33:20 y 1°. Timoteo 6:16). La promesa
de ver el rostro de Dios significa que vamos a disfrutar intimidad con Él para
siempre. La mayor parte de ella será, indudablemente, en la forma de
adoración. También significa que creceremos en nuestro conocimiento del

Señor para siempre. Él es infinito, y sin importar cuánto lleguemos a
conocerle, habrá mucho más para que experimentemos
Culminación

La profecía Bíblica está llena de gloriosas promesas que están diseñadas para
dar al pueblo de Dios un fuerte sentido de esperanza mientras vive como
peregrino y extranjero en medio de un mundo a Dios. Cuando usted lee estas
maravillosas promesas, puede entender por qué Pablo escribió estas palabras
en 1°. Corintios 2:9: “Cosas que ojo no vio, no oído oyó, ni han subido en
corazón de hombre, son las que Dios ha preparado para los que los aman”.

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